Cuando pensamos en jefe en la mayoría de ocasiones pensamos en alguien que manda, a quien debemos estar sumisos, pero en realidad un jefe es un símbolo de liderazgo, competitividad, comprensión y empatía. Aunque en un 99% los jefes solamente dan órdenes, es bueno recordar que ese 1% son aquellos jefes compresivos, donde facilmente puedes salir a tomar una taza de cafe, almorzar o te inspiran confianza para platicar, no solamente asuntos laborales sino también personales.
Desde adolescente inicié a trabajar, no porque mis padres me lo pidieran sino que siempre he sido muy independiente, he tenido infinidad de jefes y compañeros los cuales han formado mi carácter laboral, he aprendido que no debes confundir lo laboral con lo personal, he aprendido a tomar decisiones, algunas difíciles y otras no tan difíciles, pero sobre todo he aprendido que a un jefe se le respeta y se le admira cuando con sus hechos te demuestran lo especial que son, y la huella que dejan en tu vida, marcàndola para bien.
Ésta columna la dedico especialmente a Magda Melisa Garzaro mi primera jefa y Lissette de Calderón, dos jefas únicas que me enseñaron a ser responsable, me corrigieron,me motivaron a ser una profesional de éxito no solo en lo laboral, en lo personal y en el ámbito profesional, además formaron parte importante en mi vida.
"Para ser un jefe o líder en cualquier institucion, negocio o empresa no basta con ser una autoridad y ser visto como un ogro que cualquiera tiene miedo, sino que un verdadero jefe es aquél que con su carácter y personalidad te demuestra cómo se debe actuar, y sin palabras mostrar un espìritu de liderazgo, en resumen menos palabras y mejor ejemplo"...
Espero que esta columna la lean ese 99% de jefes que dan mucho que desear!!!!!
viernes, 2 de julio de 2010
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